Diabou
Gueye es una mujer trabajadora, madre de dos hijos, viuda y
con una fuerza de superación atroz que nos ha demostrado desde que empezó a
trabajar con nosotros hace 3 años como tutora del curso de Salud. Este año,
Diabou debuta como coordinadora. Ella es todo un ejemplo de lo que la educación
puede proporcionar a una persona, siempre y cuando vaya acompañada de fuerza y
aptitud.
El cambio
que se percibe en las mujeres que finalizan el curso es mucho más que nuevos
conocimientos. Todo lo que les aporta se traduce en seguridad en sí mismas, fuerza,
voluntad, compromiso con la sociedad, responsabilidad y, no menos importante, riqueza
(ya que la pobreza es vista como una falta de recursos económicos, de acceso a
la salud y la educación).
Otros de
los impactos importantes que ha tenido la impartición de dicho curso en Senegal
es la recuperación del asociacionismo en las zanas urbanas, donde ya se había
perdido considerablemente, según la alcaldesa en funciones del Ayuntamiento de
Sokone. Gracias al curso, las mujeres se sienten más seguras y protagonistas de
los cambios que deben implantarse en su sociedad para conseguir que el conjunto
viva más y mejor. Además, no podemos olvidar que la educación ayuda a mitigar
la pobreza. Ahora hay muchas mujeres que, incluso, toman la iniciativa para proponer
mejoras, participar en la toma de decisiones de la Comuna y hablar en público.
Es todo un
orgullo y una inspiración acompañarlas en este proceso tan bonito de
crecimiento personal.
"Dime y lo olvido, enséñame y lo recuerdo,
involúcrame y lo aprendo"
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